Rossi se impuso en las
elecciones primarias
Con 270.499 votos el candidato a gobernador por el Frente para la
Victoria triunfó por sobre Perotti, Rafael Bielsa y Juan Mercier
(Por Damián Espíndola) Llegando la una de la madrugada el candidato a gobernador por el Frente para la Victoria (FpV), Agustín “Chivo” Rossi, subía al escenario ubicado en el Patio de la Madera y anunciaba su cómodo triunfo en las internas: “Llevamos de diferencia más de 30 mil votos hasta el momento, con un 40 por ciento de las mesas escrutadas”. Allí fue cuando todas las agrupaciones que se encontraban en el edificio estallaron en un grito y al ritmo de bombos y banderas disfrutaron del triunfo. Con el total de las mesas escrutadas, el Chivo recolectaría finalmente el 39,92 por ciento (270.499 votos) y en segundo lugar se ubicaría, dando la sorpresa de la noche, Omar Perotti con el 30,02 por ciento (203.387 votos).
Un viento frío corría por el Patio de la Madera a las 22 cuando distintos movimientos políticos como “Evita”, “Martín Fierro”, “Juventud Kirchnerista” y “JP Descamisados”, esperaban los resultados de los escrutinios y que la voz de Rossi saliera al escenario principal y cantara victoria. Mientras tanto, en la puerta del cuarto principal un tigre inflable gigante se mantenía en pie representando al candidato a intendente Héctor Cavallero, que lleva ese apodo. Pasando al recinto principal, los bombos y las banderas se volvían a ver pero esta vez con más presencia debajo del escenario principal. Así también lo hacían los medios de distintas partes de Argentina, que llegaban a Rosario para cubrir el acto electoral.
En un momento de distensión, después de estar un buen rato en el cuarto preparado para los políticos, Cavallero salió a hablar con este medio: “Una persona con mi trayectoria no es un producto individual, sino que es un producto colectivo porque mucha gente nos acompañó toda la vida”. Con un tono de tranquilidad, como sabiendo que luego sería el triunfante dentro de la competición que había en su partido, expresaba lo que la gente le pedía y que él quería volver a involucrarse en la intendencia. Al preguntarle si el socialismo tenía chances de concluir su mandato expresó: “Yo creo que el que tiene poder tiene plus, o sea que desplazar no es fácil. Pero de todas maneras yo diría que nosotros tenemos prensa muy importante para convencer de aquí a las generales”.
También sugirió que Santa Fe y Rosario tienen que estar en sintonía con el Gobierno Nacional para que funcione mejor. De ahí que no dudó en afirmar estar seguro que la presidenta de la República Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, sería seguro candidata para su reelección. Al referirse sobre la implementación y debut de la boleta única aclaró: “Como sistema de votación es mejor que el otro, ahora desde cómo se aplica yo estoy totalmente en contra. Me parece que atenta contra la gobernabilidad”. Con la mano sobre la cabeza y cara de preocupado, sobre las 22.30 Cavallero confirmaba que una de las sorpresas de la noche sería el candidato a gobernador por el Pro, Miguel Torres Del Sel, que ya por ese entonces acumulaba una buena cantidad de votos.
Pasando las 23, los bombos y banderas comandadas por una gran cantidad de jóvenes que no superaban los 30 años, se hacían sentir más y más. Mientras tanto, en la pantalla gigante ubicada en el medio del escenario comenzaban a mostrarse los primeros números de la noche, y contaba que Rossi estaba sumando 38.205 votos, desplazando a Perotti que acumulaba 36.813. Cuanto más fría se hacía la noche y el tiempo seguía pasando, las sonrisas en las caras de las personas allí presentes iban adelantando el feliz final para el FpV. Un poco de humor e ironía también se hacían presentes en la noche, cuando dos chicos con máscaras de gorilas y propagandas electorales de Rubén Giustiniani y Jorge Boasso, candidatos a gobernador e intendente respectivamente, colgaban de sus pechos.
Se acercaba la medianoche y los números en la pantalla seguían subiendo pero no cambiaban las posiciones: Rossi seguía llevando la punta. En ese momento, la concejala y vocera de Agustín Rossi, Norma López, subió al escenario y anunció que otro de los pre candidatos a gobernador, Juan Carlos Mercier, había llamado al Chivo para felicitar su triunfo parcial y definitivo. En ese momento, también se encontraban el candidato a senador departamental Armando Perichon y el candidato a diputado provincial Roberto Sukerman. Cuando lo bombos, platillos y redoblantes seguían sonando, poco después que se bajaran del escenario, Sukerman decía: “Hemos hecho una gran elección en todas las categorías, pero claramente en las ejecutivas es una distancia muy grande. Creemos que va a seguir así y se va a reflejar en el triunfo de Héctor Cavallero y Agustín Rossi”. En su comentario, y como la mayoría del FpV, hizo su descargo contra la boleta única: “Nosotros lo criticamos desde el primer momento. Nunca se puede modificar un sistema electoral tan cerca de la elección”.
El tiempo seguía pasando y la ansiedad continuaba por parte de los allí presentes. Hombres encargados de la organización ponían una valla entre el público y el escenario principal dejando un espacio entre estos para que la prensa puediera trabajar cómoda. Llegando las 00.38 las últimas personas en llegar ya se encontraban acomodadas y fue cuando Agustín Rossi y Héctor Cavallero subieron al escenario acompañados de sus candidatos de fórmula. Allí, y luego de que se callaran los bombos, Rossi criticó al sistema de recuentos y elección afirmando que el escrutinio se había demorado más de lo esperado. “Sabíamos que iba a ser lento”, reafirmó Rossi antes de confirmar algo que muchos esperaban: que su formula sería la más votada. Cuando la algarabía crecía más y más, el Chivo anunció que Héctor Cavallero había resultado ganador de las internas, así como también lo hicieron Roberto Sukerman y Armando Perichón, lo que hizo que el precinto estallara en un grito de alegría y algunos en llanto.
Nadie se bajó del escenario antes de que Agustín Rossi pidiera que continuaran “haciendo el aguante” y en ese momento anunció: “Todo esto no lo hubiéramos logrado sin él”, y en ese momento un retrato de Néstor Kirchner se elevó en los brazos del Chivo. Luego de esto, el presidente del bloque del FpV se acercó a hablar con la prensa y con los artefactos musicales de fondo, que casi no dejaban escuchar, dijo: “Nos vamos a quedar acá hasta que esté escrutado el 100 por ciento de los datos”. Promesa que luego no se cumplió, ya que a altas horas de la madrugada seguían escrutando las mesas. Cuando se le consultó si creía que podía pasar lo mismo que en Catamarca, fue prudente y afirmó que iban a esperar a tener todas las mesas escrutadas.
El candidato a gobernador se dirigió al cuarto donde se mantenían a la espera. En cambio, Perichón se encontraba saludando a la gente y hablando con los medios. Con lágrimas en los ojos y la voz temblante comentaba su triunfo. “Es una enorme alegría. Porque no venimos de la política tradicional y esto nos permite seguir creyendo. Uno siempre cuando está en esto busca ganar, pero con los datos que tenemos es bastante importante”, dijo, antes de retirarse abrazado de sus compañeros y amigos secándose los ojos húmedos de alegría.
Un largo rato pasó para que Rossi volviera a subir al escenario y se permitiera proclamar ganador a pesar de que no estaban el 100 por ciento de las mesas escrutadas. Antes de esto la gente iba de acá para allá, algunos nerviosos, otros más tranquilos, especialmente por los puestos ganados que se habían anunciado. “Felicitaciones”, era la palabra que se escuchaba cada vez más fuerte por las voces de los presentes. La pantalla gigante seguía mostrando la cantidad de votos que recopilaban los postulados al cargo de gobernador. Y si bien la posición de Rossi en esa tabla no varió, sí lo hizo la cantidad de votos con respecto a la de Bonfatti, candidato a gobernador por el Frente Progresista Cívico y Social (FPCyS), ya que en el último recuento de votos que mostraba la pantalla lo superaba por 656 (el recuento final posicionaría al socialista casi 12 mil votos por encima de Rossi). Pero esto no permitió que se opacara la fiesta que los movimientos políticos llevaban a cabo.
Luego de más de una hora de espera, todos los representantes de la formula del FpV subían nuevamente al escenario. Lo primero que aclaró Rossi fue que lo había llamado Omar Perotti para felicitarlo por su victoria. En ese mismo momento, volvió a cargar contra el recuento del escrutinio afirmando: “Faltan escrutar el 40 por ciento de las mesas, pero ya estamos seguros que ganamos”. Cuando eso sucedía, el candidato a gobernador pegó un grito como queriendo calmar algo que estaba sucediendo en el público, como si alguien se estuviera peleando con otra persona. Sin embargo lo que pasaba era una riña de perros, tal como le aclararon desde el público a Rossi, que dijo: “Yo creí que era un chivo”. Los allí presentes rieron a carcajadas como si estuvieran presenciando un espectáculo cómico. Dejando atrás las risas, Rossi continuó: “Nada nos fue fácil en esta provincia. Queremos acompañar los próximos cuatro años de Cristina como presidenta desde la gobernación de Santa Fe”.
Abrazado a su esposa y a sus hijos, Rossi se despidió con alguna que otra lágrima en los ojos. Con la imagen del ex presidente Néstor Kirchner alzada en brazos se despidieron cantando la marcha peronista. El acto finalizó a las 02.34, con una noche fría que rondaba los 8 grados. Poco más de 20 minutos habría que esperar para que la gente se dispersara y el recinto quedara vacío. Se observaba un gusto dulce en el paladar político de los representantes del FpV en Santa Fe. Sin embargo dos meses faltan para saber si ellos representarán a la provincia. Además de la preocupación generada por la cantidad de votos acumulados por Miguel Torres Del Sel, deberán esperar y seguir trabajando para poder triunfar el 24 de julio en las elecciones generales.