01 noviembre 2010

Instituto Nacional de Enfermedades Virales Humanas

LA HISTORIA DE UNA VACUNA
“Podemos mostrar con
orgullo su vivo legado”
Julio Maiztegui, el medico “pincha rata” que entregó todo a
la ciencia, sigue educando a través del tiempo con su ejemplo


(Por Julio Montero) En la década de 50’ la Fiebre Hemorrágica Argentina (FHA) llegó a convertirse en emergencia sanitaria. Diferentes grupos de investigaciones nacionales e internacionales lograron descubrir la etiología de la enfermedad y el reservorio del virus Junin. En ese momento comenzó una etapa experimental en materia de tratamientos y vacunas. Recién en 1965 un grupo de investigadores y técnicos provenientes del Centro de Educación Médica e Investigaciones Clínicas (Cemic) y del Instituto Nacional de Microbiología “Dr. Carlos G. Malbrán”, coordinados por el Doctor Julio Maiztegui, se instalaron en Pergamino dando comienzo a las investigaciones.

Este rejunte de profesionales creó el Instituto Nacional de Estudios sobre Virosis Hemorrágicas (Inevh). Una de las primeras acciones de la institución fue la organización de un programa nacional de lucha contra la fiebre hemorrágica o “mal de los rastrojos” (llamado así comúnmente a causa de que el agente vector del virus es el ratón). Estas medidas lograron descender la letalidad de la enfermedad, que por 1970 superaba el 30 por ciento, hasta llegar al 1 por ciento, significándole al Inevh reconocimientos y galardones.
En 1990 se estableció que la Candid 1 era una vacuna eficaz para prevenir la Fiebre Hemorrágica Argentina y dos años después la institución amplía sus fronteras ocupándose de todo tipo de enfermedades virales, a nivel nacional. En 1994, luego de la muerte de su fundador, el directorio decide unánimemente que la entidad cambie su nombre por el de Instituto Nacional de Enfermedades Virales Humanas “Julio I. Maiztegui”, en forma de tributo.
La prestigiosa institución decidió abrir sus puertas a la comunidad a partir del 2008 para mostrar las actividades que se llevan a cabo en el instituto. “El hincapié está puesto en enseñarles a los alumnos del nivel medio qué hacemos y cómo lo hacemos para que ellos se interesen”, expresó la licenciada María Feuillade, responsable del Departamento de Capacitación del Inevh.
Por su parte la directora Delia Enria aseguró: “El Doctor Maiztegui enfrentó cambios duros mientras realizaba sus investigaciones y hoy podemos mostrarle a la comunidad, con orgullo, que su legado continúa con nosotros”. El recorrido del edificio comienza por la muestra de los diferentes sectores de trabajo para reconocer cuáles son las diversas actividades de carácter específicas pertenecientes a cada área. El itinerario culmina con una charla en la que se resumen todas las aristas científicas que se desarrollan en el instituto Julio Maiztegui.
La licenciada Feuillade ratificó que este año las jornadas itinerantes llevan un número record de visitantes, diciendo que a esta altura del año fueron alrededor de 550 personas, cien más que el año pasado, y teniendo en cuenta que todavía queda todo el mes de noviembre “las expectativas son excelentes”. Las visitas al Inevh se abren una vez por semana, en el mes de agosto, después de las vacaciones de invierno, y culminan al principio del mes de diciembre.
“Es difícil hacer ciencia, lo fue para el doctor Maiztegui en su momento y lo es para nosotros hoy en día. Se necesita estar muy comprometido con la institución, con el trabajo y querer mucho lo que se hace”, confesó Enria. Y culminó diciendo que en estas jornadas quedó demostrado el nivel de compromiso que cada uno de los trabajadores de la institución tiene para con su tarea, desde la más “pequeña hasta la más grande”.