14 septiembre 2010

Salud: calendarios que deben ser analizados

OTRA FALENCIA EN LA SALUD
El plan de vacunación no
contempla vacunas importantes
Los médicos se encuentran en un dilema a la hora de indicar
las opcionales por los altos precios a los que se venden

(Por Maite Inchausti) El calendario nacional de vacunación de la República Argentina indica 13 vacunas obligatorias como método seguro de protección contra las enfermedades infecciosas, no sólo en niños sino también en adultos. Pero hay otra serie inmunizaciones que no están comprendidas dentro de este plan que dicta el Ministerio de Salud de la Nación, y son vacunas caras y a las que no toda la población tiene acceso.
Dentro de estas últimas podemos destacar la antineumocóccica, la vacuna antimeningocóccica, la de Varicela, de rotavirus, la séxtuple (dosis combinada que previene Polio, hepatitis B, difteria, tétanos, tos convulsa), la vacuna contra la fiebre amarilla, la antigripal, la antirrábica y la vacuna contra en HPV (contra el virus del papiloma humano). Muchas son las enfermedades que hoy en día generan preocupación en padres y especialistas y que podrían controlarse con la aplicación de vacunas. Quienes tienen acceso a obras sociales o medicina prepaga, o gozan de una holgada situación económica no suelen verse afectados por problemas de este tipo. Los sectores con menos recursos son los que sufren la falta de prevención.

 En Argentina mueren por año más de cien niños menores a 5 años a causa del neumococo y otros cientos quedan con secuelas neurológicas. Desde el Ministerio de Salud de la Nación se prevé agregar la vacuna al calendario obligatorio y gratuito para el próximo 2011. Sonia Morero, médica pediatra y miembro de la Sociedad Argentina de la Salud Integral del Adolescente (Sasia), opina que la principal vacuna que debería estar incluida en el calendario de vacunación gratuito es la antineumococcica. Su importancia médica es que actualmente el germen del neumococo es el principal causante de meningitis en niños menores de 2 años.
La doctora Morero menciona que también la varicela es una enfermedad que puede tener importantes complicaciones como meningoencefalitis e incluso la muerte. “Es inadmisible llegar a estas instancias teniendo una vacuna efectiva, tal como sucede con el rotavirus. Una complicación que no respeta clases sociales produciendo gastroenterocolitis de grados diversos, siendo los niños de bajos recursos los más hospitalizados por deshidratación. Los pacientes que han incorporado esta vacuna han demostrado una notable disminución de esta patología”, aseguró.
Consultado sobre el particular, el médico pediatra Daniel Leto destacó la importancia que tienen las vacunas en materia de prevención. “Lo cierto es que algunas enfermedades se han erradicado definitivamente y otras dependen de la cantidad de personas que puedan ser inmunizadas. Por lo tanto, cuando hablamos del tema de vacunas dentro de calendario o fuera del mismo, todo dependerá de que el Ministerio de Salud de la Nación pueda comprarlas. Y lo más importante, la cantidad de dosis que pueda adquirir para inmunizar por lo menos al 90 por ciento de la población, hecho éste que aseguraría la erradicación definitiva de la enfermedad”.
Como las vacunas son producidas en su mayoría por laboratorios privados y se venden en forma privada a valores inaccesibles, los médicos se ven en un dilema a la hora de indicarlas. El doctor Néstor Arroyo, pediatra y secretario adjunto de la Comisión Directiva de la Asociación Médica de Rosario, menciona que siempre que un padre le hable de una vacuna se ve en la obligación de indicarla, pero que muchas veces se genera una situación incómoda porque no todos los padres tienen el dinero para vacunar a sus chicos. Algo similar plantea el doctor Leto: “¿Qué hacemos con quienes no pueden ponerle las vacunas opcionales a sus hijos? ¿Los angustiamos diciéndoles que lo mejor sería vacunarlos pero no importa si no puede comprarla? ¿O simplemente no la indicamos? Dilema que tenemos los pediatras, sobre todo los que asisten a chicos en instituciones públicas ya que ni siquiera pueden hablar sobre el tema ya que las vacunas no se encuentran dentro de una campaña”.
Vacunas optativas y obras sociales
Las obras sociales reconocen el total de las vacunas que figuran en el calendario nacional en caso de que los padres prefieran vacunar al niño en forma particular y no en los efectores públicos recomendados. Las medicinas prepagas reconocen un determinado porcentaje en las vacunas opcionales, según los planes. En su mayoría trabajan por reintegro y cubren desde un 40 hasta un 100 por ciento en los planes más elevados de obras sociales preferenciales. Así los padres que eligen vacunar a sus hijos deben concurrir con la prescripción médica a la obra social donde se le devuelve el porcentaje correspondiente.
También se discriminan marcas y una serie de farmacias donde comprar las vacunas. Así entonces quien decida colocarle a su pequeño la vacuna contra el rotavirus deberá dispensar entre 100 y 300 pesos. La que protege contra la varicela ronda los 250, al igual que la vacuna antimeningocóccica. La antineumocóccica varía entre los cien pesos y 400 pesos, en el caso de la renombrada Prevenar.
Numerosos debates sobre el tema han generado que se convierta en obligatoria la inoculación contra el neumococo para todos los niños. De esta forma en el 2011 el calendario nacional de vacunación nacional cubrirá una de las vacunas más solicitadas y costosas del calendario opcional.
Nuevas vacunas
Una de las vacunas que más revuelo generó es sin dudas la que previene el cáncer de cuello de útero, que aún no se aplica en forma masiva en nuestro país. Se discute actualmente incluirla en el calendario ya que es la más costosa de todas las inoculaciones y además no es de amplio espectro. Andrea Casella, tocoginecóloga y profesora de la cátedra de obstetricia del Instituto Universitario Italiano de Rosario expone: “El Estado lanza una campaña nacional sin respuesta. No lanza una buena campaña porque la vacuna no es económica y hay métodos mucho más económicos para prevenir o diagnosticar el HPV”.
La vacuna se vende bajo receta en cualquier farmacia y aplicar las tres dosis cuesta unos 2800 pesos. En caso de poseer obra social puede solicitarse reintegro y algunas de renombre (Osde, Swiss Medical, Omint) reconocen hasta un 70 por ciento. La doctora Casella la remienda en sus pacientes, si bien reconoce que en algunos casos sólo sirve para evitar males menores y no es altamente segura para mujeres que se han iniciado en la vida sexual, además de que manifiesta el difícil acceso de gran parte de la población por el alto costo de las dosis.
Por otra parte suelen aparecer brotes y epidemias que generan conmoción en la sociedad y el Ministerio de Salud implementa planes de emergencia para salir del trance. Tal es el caso de la campaña realizada con la vacuna contra la gripe A H1N1, donde en primer lugar se vacunó a trabajadores de efectores públicos, embarazadas y menores de 6 meses de edad y luego se prosiguió por distintos grupos de riesgo. Campañas que fueron realizadas en efectores públicos y en forma gratuita.
Consultada sobre el particular, la doctora María Cecilia Barrios, doctora del Centro Comunitario Nº 3 del Barrio 7 de Septiembre, destacó que el tema de las vacunas y la disponibilidad es complejo. “Por un lado hay un tema económico y también uno de salud pública. Tiene mucho que ver con datos epidemiológicos y con factores de riesgo. Algunas vacunas antes no eran obligatorias y hoy lo son, otras son aplicadas sin cargo para pacientes de riesgo y otras muy necesarias salen fortunas. Esto tiene que ver con medicina basada en evidencia, con costos y con impacto y sobre todo con decisiones de gobierno”.
El calendario de vacunación es una realidad que atraviesa el sistema de salud nacional y que no puede quedar al margen. Es fundamental que se reformule en relación a las nuevas vacunas. O bien que se generen nuevas políticas de estado que solucionen el problema del acceso de determinados grupos socio-económicos a vacunas e inmunizaciones de vital importancia.