07 junio 2010

Cultura

CON UNA ESPADA Y UNA FLOR
Homenaje al radioteatro

(Por Luciana Ekdesman) Una radio antigua a válvulas se ilumina y comienza a sonar. Rápidamente aparece una jovencita con un bowl en la mano, revolviendo su contenido al compás de la voz del relator y del sonido de la cortina. Se oye el anuncio del próximo programa: El León de Francia. El escenario queda dividido en dos. Por la bambalina izquierda ingresan algunos de los personajes del radioteatro. La chica desde su casa no se pierde un instante de lo que sucede del otro lado del aparato de madera. Todos lo días, a la misma hora, en el mismo lugar, la gente se reúne para seguir la historia de este héroe, que hace temblar a los villanos con su espada y que va de casa en casa, dejando una flor a las mujeres solteras y conquistando sus corazones.

Durante una hora y media, los protagonistas nos transportan a los años 40 y 50, cuando no existía la televisión y la radio era la dueña de la información, de las notas musicales, de los goles del fútbol, la vedette de las radionovelas. Por sobre todas las cosas era la hacedora de sueños y fantasías, trasladaba a los hombres y mujeres hacia mundos inexplorados y desconocidos. Los actores eran conocidos por sus voces que todos los días les daban vida a los diversos personajes en vivo y en directo. Muchas veces aquellos artistas cuando terminaban el programa se subían a un colectivo que los esperaban fuera de las emisoras e iban de pueblo en pueblo para interpretar sus obras. Esto se refleja claramente sobre el escenario.

Bienvenido León de Francia muestra la vida de esas personas que llevaban alegría e intriga a los hogares pero que también experimentaban sus propias desgracias y miserias. La pieza plantea diversas temáticas que están vigentes en la actualidad. El alcoholismo, la soledad, la vejez, la ambición, la violencia, la venganza, el amor, la infidelidad, la inocencia y la decadencia. Es una mezcla constante de ficción y realidad. Cada actor interpreta a una persona y, a su vez, a un personaje de la radionovela.

Carlos Mendizabal (Raúl Calandra) es el director y productor del radioteatro e interpreta al León de Francia. Es un hombre violento y pedante, que emplea a los demás personajes y los conduce por las diferentes localidades que visitan. Uno de sus empleados es Antonio Bavilaqua (Naum Krass), un actor de trayectoria que hace años que promete su retiro, le gusta beber y anhela despedirse con gloria. Quiere a toda costa ser protagonista de la puesta. Está enamorado de Amanda Barrios (Sara Lindberg), la exitosa voz de todos los tiempos, que está casada con Rubén del Mar (Matías Martínez), un joven principiante a quien la mujer le plancha las camisas y lo trata como a un hijo. Amanda vive en soledad, sufre y llora por el paso del tiempo.

Una de las más jóvenes del elenco es Selva Galante (Griselda De Lorenzi), la protagonista de El León de Francia, una mujer golpeada por su marido que permite y justifica los abusos de autoridad para continuar en cartel. Ella mantiene relaciones a escondidas con Rubén del Mar. Nelly Arroyo (Maru De Rosa) es una joven novata e inocente, seguidora y fanática de las radionovelas. Ansía pertenecer a ese mundo y cuando lo logra se da cuenta que no todo lo que brilla es oro.

Los textos son de la actual ministra de Educación de la provincia de Santa Fe, María de los Ángeles González y Néstor Zapata, quien está a cargo de la puesta en escena. Fue escrita en 1978. Desde mediados de mayo se presenta en la sala Arteón, Sarmiento 778 planta alta. Los autores se valen de elementos que resultan atractivos y que atrapan al espectador por su fácil identificación con la vida real. Hay algunos momentos dramáticos y otros alegres. De vez en cuando se hacen silencios eternos y de repente se sienten carcajadas de los espectadores. Juega con situaciones límites donde uno no sabe si reír o llorar.

Las actuaciones son muy buenas y el desempeño de la compañía es parejo. Sobresale el gran actor y profesor de teatro Naum Krass, que despliega su magia y experiencia sobre las tablas con cada línea que pronuncia y en cada instante que aparece en escena. También se destaca Sara Lindberg con su inigualable tono de voz grave que logra cautivar al público y emocionar hasta las lágrimas. La revelación, sin lugar a dudas, es Maru De Rosa, una joven actriz que a pesar de su corta edad demuestra experiencia, ductilidad e histrionismo en cada gesto y mirada. Está a la altura de las circunstancias y gana protagonismo con el correr de los minutos.

Un excelente y merecido homenaje al radioteatro. Una importante y digna apuesta local para todas las edades. Como dice en el programa de la obra: “Para que los más jóvenes lo conozcan, para nuestro recuerdo, para alimentar ese mito de la memoria”.


Ficha
Bienvenido León de Francia
Intérpretes: Naum Krass, Sara Lindberg, Raúl Calandra, Griselda De Lorenzi, Matías Martínez y Maru De Rosa.
Dirección y puesta en escena: Néstor Zapata
Libro: María de los Ángeles González y Néstor Zapata
Sala: Arteón